Romperse
el corazón
mil veces
sólo significa
que lo has usado.
No conozco
mayor pena
que la de alguien
que nunca
invierte
sus latidos.
Prefiero
haber amado
y perdido
que perderme
sin haber amado.
Y sonreírle
al café,
al cigarro,
al mar,
a la cerveza
y a la chica sin miedo;
al sol de sus ojos.
Aunque, sí,
lo confieso:
Con mi sonrisa
libro y gano
mil batallas,
pero,
con la suya
gano la guerra.